En un recinto no muy cercano, donde el pasto cambia de color
mediante como sea el día, dándole un toque de alegría al lugar donde hay
muchas aldeas; en una de ellas la más humilde cerca de un boscoso
bosque debajo de una colina habitaba una pequeña familia formada por la
pareja entre el campesino y la hermosa esposa, y su pequeña niña llamada
Susan. Su hija con tan singularidad ternura, y dulzura hacía que su
aldea tuviera un brillo inigualable.
Un día de Venus, cuando los
rayos del Sol acariciaban tenuemente toda aquella siniestra vegetación;
la mamá de la pequeña Susan, fue a lavar al riachuelo con su retoño; un
poco tiempo después, mientras la señora estaba adentrada en el lavado de
sus prendas, la pequeña Susan que jugaba con el agua y con un tronquito
a hacer ondas se inquietó al ver una mariposa de color rosa, en su mano
derecha, y luego esta le hizo como una caravana ante ella y empezó a
volar alrededor de Susan. La pequeña dejó el tronquito y empezó a
bailar junto con la mariposa, alejándose del riachuelo y de su madre,
adentrándose en el bosque, seguían bailando de tal forma que llegaron a
un árbol en el cual estaba rodeado de mariposas azules y hasta abajo se
colocó la mariposa rosa, y la niña se impresionó tanto que rodeo el
árbol, sin saber lo que ella hacía hizo la parte de un hechizo, y salió
un duende de las pequeñas hierbas que rodeaban al extraño árbol,
sentado en una hoja deslizándose de tal forma que se acercó con la
pequeña Susan y le dijo:
- Salud, primavera, pequeña Susan encantadora!, ando engrandecido por tan cuan dulzura veo
-Hola, pequeño duendecito- dijo Susan extrañada
- -Se que no sabes mi nombre, me llamó Domulk, enviado desde el reino Diamond Valey- el duende se sacó un pequeño pergamino dorado con un pequeño bolsillo, y continuó- donde hay preciosos cristales, que dan un poder cada uno diferente, permíteme leerte este pequeño pergamino, enviado para ti la pequeña y tierna Susan:
- “La sonrisa inocente de tu rostro, ilumina los días que pasan al ver que la luz del sol nos permite saludarte pequeña Susan el reino Diamond Valey te ha conferido a ti, por ser como eres la extraña misión: Cuando el Sol llegué a su punto más alto deberás encontrar un caballo morado, que estará situado alrededor de unos árboles en forma de una media luna acompañado de un mago, al acabar lo que hace el mago tú pequeña Susan le entregarás los diamantes que tienes en el bolsillo, sí lo encuentras en el momento preciso el caballo te concederá tu más anhelado deseo ”
El
duende Domulk le entrego a la pequeña Susan el bolsillo el cual
contenía 5 extraños diamantes de colores que al ponerlos al sol se
hacían polvo, y en el agua se volvían a formar, pero con diferente
forma, y ella lo guardo en la bolsita delantera de su vestido de color
amarillo.
Así que Susan emprendió la búsqueda acompañada de la
mariposa rosa, que ella le ayudaba a pasar por todo el bosque
encontrándose con flores de rara naturaleza y con su singularidad forma,
como muchos hexágonos en serie, tipos bencenos tornándose a compuestos
aromáticos como por ejemplo el benceno, naftaleno, antraceno,
fenantreno, benza(a) pireno, entre otros compuestos, que daban lugar a
puras flores de diferentes colores y dando una sensación de rico aroma.
Susan
caminaba acompañada de la mariposa por el sendero del bosque hasta
encontrarse de frente con un Ent llamado Barbol, la mariposa giro
alrededor de este hasta llegar a una rama muy alta (su nariz) haciendo
que este despertará, cargando a la tierna Susan diciéndole – “ Niña,
¡tan cuan especial eres! Te llevaré al lago del espejismo, pero lo que
debes hacer es golpear con tu planta del pie derecho a un árbol que
tenga flores de forma de la floreceína dando fulgor, y le dirás NAO”.
Por fin llegaron al lago del espejismo, el Ent con un su brazo dejo a
Susan con la mariposa cerca del árbol con tan raro y llamativo
centelleo.
-NAO- colocando la planta de pie en el tronco de este peculiar árbol.
El
árbol dio giros entre su eje hacia el sentido de las manecillas del
reloj transformándose en una pequeña embarcación con velas color
característico, emplazándose a la orilla de lado espejismo, la niña
subió en el navío y al emprender el viaje miro hacia abajo, donde el
agua parecía un tipo espejo donde nadaban muchas estructuras
(enantiomeros) y unas no se movían simulando rocas, la mariposa hizo que
se detuviera el navío al ver un fenol en el pasto, y la niña bajo y
se coloca en el Carbono más estable para poder divisar los árboles que
con extraña colocación hacían la forma de media Luna.
Al situarse
cerca de ahí percibió la presencia de un mago, vestido de blanco llamado
Grignard, que como sabía el nombre, porque lo decía su traje (bata) con
unos lentes extraños que traía varías pócimas entre ellos soluciones y
disolventes. Al mover su vara hizo que viniera un semental caballo muy
grande relinchando al hacer este movimiento el mago le aventaba THF
(tetrahidrofurano), y alrededor de los arboles trotaba el caballo
tornándose de color café (dorado)
Susan se acercó al mismo lugar
y encontró diminutas cargas negativas, que le hacían un efecto de
apantallamiento que no la dejaban visualizar lo que ocurría con el
caballo. Mientras la niña intentaba pasar, el mago tomo una pócima
bromo benceno con un toque de tetrahidrofurano, haciendo un mezcla en
un dispositivo extraño con una llave giratoria, y con tapón de nombre
embudo Quickfit, como el caballo se agito quiso reposar al centro de
los árboles, el mago se acercó para darle de tomar la mezcla que había
hecho y los árboles se empezaron a oxidar generando calor y así
propiciando que el caballo se tornará de color morado, tipo como un
jugo de uva. El Sol se encontraba en su punto más alto
La niña
termino traspasando la valla de electrones, tomando un pequeño trago de
agua, llegó hasta donde el corcel de tan extraordinario color, sacando
la bolsita de los diamantes y agarrando ya los diamantes con su mano
izquierda se los ofreció al caballo, y como los rayos del Sol tocaban su
linda piel los diamantes se hicieron polvo, y en ese instante Susan
roció con agua el polvo y se formaron 5 estrellas, y se las entrego así
al corcel y pidió
-Anhelo que, todo este mundo terrenal tenga
siempre una esperanza de vivir, que sepa que con tan solo una sonrisa
pueda alegrarse su día, aunque esté se vea muy obscuro; y que todas las
personas sepan valorar los detalles tan diminutos para poder ser feliz
- dijo Susan con una voz angelical tomo con sus manos el extremo de su
vestido amarillo haciéndole una caravana al caballo y este a su vez,
se la llevo, dejándola cerca donde su madre estaba.
Al
escuchar la voz de su madre -¡Susan, Susan!- con eco por todo el
bosque; la niña despertó de cual sueño había tenido. Observando que ella
estaba en su pequeña aldea, y su mamá apenas iba a lavar en el
riachuelo.